Cómo crear un «hogar amigable» a prueba de asma

Cómo crear un «hogar amigable» a prueba de asma

Bienestar | 22/01/2024

El asma u asma bronquial es una patología del sistema respiratorio muy prevalente en especial  durante la infancia, aunque afecta a personas de todas las edades [1].

Existen diferentes tipos de asma: alérgica, no alérgica, estacional, ocupacional, infantil, grave… Todas sus variantes se caracterizan por la inflamación de las vías aéreas. Esto dificulta la respiración y produce una sensación de falta de aire. Entre los principales síntomas se encuentran tos, broncoespasmos (obstrucción de los bronquios que dificulta la respiración), disnea (falta de aire), opresión torácica y sibilancias [1].

Hay dos grandes factores que podrían producir un broncoespasmo o la contracción de las fibras musculares lisas de la vía aérea:

  • Los agentes irritantes: Tabaco, estufas de leña, olores fuertes…
  • Los alérgenos: Ácaros del polvo, pelo o plumas de animales, por ejemplo. Mientras que los primeros pueden afectar a toda la población [4], los alergénicos solo impactan en las personas que tienen sensibilidad a ello [3].

En espacios exteriores, es más difícil controlar estos desencadenantes que podrían desencadenar un ataque de asma). Afortunadamente, existe una serie de medidas preventivas que puedes aplicar en casa para minimizar el riesgo de sufrir una crisis asmática.

Prevención de agentes irritantes

  1. Evita el tabaquismo. Tanto si eres paciente asmático, como si no, es muy importante que no fumes. El tabaquismo no solo perjudica tu salud, si no la de todos los que te rodean. Si vives con personas fumadoras, es importante que no fumen cerca de ti, sobre todo en espacios cerrados, como en casa [4].
  2. Sistemas de calor sin humo. La inhalación del humo de las estufas de leña o las chimeneas irritan las vías respiratorias [4] [5]. En su lugar puedes usar un sistema de calefacción central [6]. Eso sí, recuerda que las fuentes de calor resecan el aire. Por ello, en caso de que fuera necesario, un humidificador puede ayudarte a mantenerlos unos niveles de humedad adecuados [6].
  3. Utiliza productos no perfumados. Evita el uso de velas aromáticas, perfumes o ambientadores, sus aromas intensos pueden dificultarte la respiración. En su lugar utiliza productos naturales o sin perfumar [4].
  4. Limpia y airea tu hogar. Los productos de limpieza y los insecticidas también tienen un fuerte olor que pueden provocarte una crisis asmática. Igual que en el caso anterior, lo mejor es utilizar la opción sin perfumar. Si no es posible, ventila bien la casa una vez los hayas acabado de usar [4].

Prevención de alérgenos

  1. Usa fundas protectoras. Protege las almohadas y los colchones con fundas protectoras para evitar que los ácaros del polvo se introduzcan en ellas. También deberías prescindir de alfombras y tapices [3].
  2. Deshumidificador. Los problemas de humedad favorecen la aparición de moho y hongos. Se recomienda que los niveles de humedad en el hogar no sean superiores al 55% [4]. Si vives en una zona muy húmeda, puedes usar un deshumidificador para mantenerlos estables [3].
  3. Limpia periódicamente. Lava las sábanas con agua caliente una vez a la semana y quita el polvo con un paño húmedo o con una aspiradora con filtro HEPA («High Efficiency Particle Arresting») [3]. Al hacerlo, usa una mascarilla [3]. Asimismo, si tienes moho, retíralo de las superficies duras con agua y jabón [3].
  4. Protégete del polen. Tal y como te contamos en este artículo, la polinización de los árboles en primavera aumenta las crisis por asma. Durante esta época, cierra las ventanas, lava tu ropa con frecuencia y tiéndela en el interior de casa para evitar que el polen se adhiera a ella [3].
  5. Guarda las sobras con recientes herméticos y tira la basura. Los roedores y las cucarachas, entre otras plagas, son otro desencadenante muy común [3]. No dejes restos de comida y tira los desechos orgánicos para evitar atraerlos. Además, si usas un repelente para matarlos, debes airear la habitación para que se vaya el olor [3].
  6. Dormitorio seguro. Si vives con un animal doméstico en casa, como un perro o un gato, mantenlo alejado de tu cama. El pelaje o las plumas de los animales son otro alérgeno muy común [3]. Retira su pelo de sofás u otros muebles de tela con un aspirador con filtro HEPA [3]. Además, si es posible, no utilices almohadas de pluma natural [3].

Recuerda estas son solo algunas recomendaciones orientativas, en ningún caso sustituyen una medicación prescrita por un médico. Si tienes alguna duda, consulta a tu profesional sanitario de referencia para que te aconseje que es lo mejor para ti.

Si quieres saber más, en nuestra biblioteca puedes descargarte diferentes guías prácticas sobre el asma.

Fuentes

[1] Asma. Organización Mundial de la Salud (4 mayo 2023). Enlace.

[2] Types of asthma. Asthma + Lung UK (s. f.). Enlace.

[3] Sockrider M. Managing Your Asthma: Avoiding Allergens; Am J Respir Crit Care Med (2022), Vol. 205: 25 – 26. DOI: 10.1164/rccm.20512P25. Enlace.

[4] Sockrider M. Managing Your Asthma: Avoiding Irritants; Am J Respir Crit Care Med (2022), Vol. 206: 1 – 2. DOI: 10.1164/rccm.20601P1. Enlace.

[5] What is indoor air pollution? Asthma + Lung UK (s. f.). Enlace.

[6] Esteva Espinosa E. Antitusivos, expectorantes y mucolíticos. Clasificación descriptiva; Elsevier (2008), Vol. 27, Núm. 11: 44 – 47. Enlace.