¿Cómo dormir bien en verano cuando tienes FPI?

¿Cómo dormir bien en verano cuando tienes FPI?

Cuidados | 17/07/2021

Dormir es un elemento básico en la salud de las personas porque ayuda a regular, reposar y reparar el organismo. El sueño permite que el cerebro pueda reiniciarse y funcionar correctamente. Además, tiene un papel muy relevante en el sistema endocrino e inmunitario y nos protege de amenazas externas, como los problemas de salud mental y otras enfermedades.

Hay diversos factores que pueden influir en el sueño. En el caso de la Fibrosis Pulmonar Idiopática, estos pueden ser fisiológicos, relacionados con la propia patología, y psicológicos, como la ansiedad y la depresión[1]. Además, debemos sumarle los factores ambientales que también pueden afectar la calidad del sueño como son el ruido, la luz y la temperatura ambiental.

En verano, es evidente que la temperatura ambiental es uno de agentes externos más determinantes en la calidad del sueño. A medida que la temperatura sube, una mayor temperatura corporal hace que el cerebro genere menos melatonina, la hormona responsable del sueño y aumente la frecuencia cardiaca y respiratoria, así como la sudoración. [2]

Recomendaciones

Entonces, ¿qué podemos hacer para mejorar el descanso en verano?

  1. Lo ideal sería mantener la temperatura ambiente de la habitación entre los 24 y 25 grados para ello podemos:
  2. Abrir ventanas y balcones durante las primeras horas de la mañana y durante la noche y mantenerlas cerradas (incluyendo las persianas) en los momentos de más calor.
  3. Si dispones de aparato de aire acondicionado, es muy recomendable ponerlo en marcha al menos una hora antes de acostarse para que el ambiente sea más fresco.
  4. Si utilizas ventilador lo ideal es colocarlo de manera que haya circulación de aire, pero que no te enfoque directamente.
  5. Es recomendable apagar y desconectar los aparatos eléctricos no necesarios, ya que desprenden calor y aumentan la temperatura de la habitación
  6. Es muy recomendable dormir ligeramente incorporado, ya sea con almohadas o con camas articuladas para facilitar la respiración.
  7. Si notas sensación de ahogo al despertar, cuando te incorpores siéntate inclinándote hacia delante, ya que en esta posición puede entrar más volumen de aire en los pulmones.[3]
  8. Una buena higiene del sueño es fundamental y para ello debes procurar ir a dormir siempre a la misma hora. El cuerpo acabará acostumbrándose y se preparará para el sueño.
  9. Realiza alguna actividad tranquila y relajante antes de dormir.
  10. Cena ligero y al menos dos horas antes de ir a dormir.
  11. Evita tomar estimulantes como te o café, horas antes de acostarse.
  12. Se desaconseja el uso de pantallas con luz azul, como móviles y tabletas antes de ir a dormir, porque esa luz interfiere en la conciliación del sueño.

Recuerda: Este contenido no sustituye el diagnóstico realizado por un profesional sanitario. Ante cualquier duda sobre el mismo, dirígete a tu profesional sanitario. Se trata de una publicación de carácter orientativo y divulgativo, por lo que no debes someterte a tratamientos ni seguir consejos sin dirigirte antes a un profesional sanitario.


Referencias:

[1] Dobson, Linda, et al. «Higiene del sueño en pacientes con enfermedad respiratoria crónica.» Nursing (Ed. española) 36.6 (2019): 54-58

[2] Martínez-Nicolás, A y Blázquez-Manzanera, A. “La hora de nuestro cuerpo. Monitorización ambulatoria circadiana” en Revista Eurobacteria n33. (2015): 22-28

[3] Dobson, Linda, et al. «Higiene del sueño en pacientes con enfermedad respiratoria crónica.» Nursing (Ed. española) 36.6 (2019): 54-58